miércoles, 27 de agosto de 2008

Irma y la farmacia

"¡Está abierto de par en par!", dice Irmita, maravillada ante la puerta de un Farmacity pasada la medianoche.

Irma, que no tiene un Farmacity cerca de su casa, no se termina de sorprender ante este formato de farmacia. Ella está a favor de todo lo que sea progreso, al revés de Orlando, que recela de los cambios. Irma quiere pesarse en una balanza electrónica aunque le cobren, pasearse entre las góndolas eligiendo remedios y comprar productos marca Farmacity, pero tiene que conformarse con la farmacia del barrio. Le hincha pedir laxante y que el farmacéutico le haga recomendaciones al respecto. O que le pregunte cómo anda su mamá de la presión, porque una vez, hace años, tuvo un pico de hipertensión estando en lo de Irma y lo llamaron de urgencia.

Pero lo peor es cuando quiere usar la balanza con la pesita, porque siempre le parece que funciona mal (que le agrega kilos, obvio).

martes, 26 de agosto de 2008

Función privada

Hoy por hoy, Irma y Orlando irían a ver 'Un novio para mi mujer'. No sería una misión sencilla arrastrar a Orlando hasta el cine, pero los motivos que Irma tendría para convencerlo serían varios y contundentes: participan actores conocidos (mal que mal, ambos conocen a Adrián Suar y a Valeria Bertuccelli), parece divertida y la dan en un cine cerca de casa. Pero, por sobre todo, el dato de que ya la vieron 200 mil personas les hace creer que se están perdiendo algo.

Como el manual lo indica, Orlando quizás cabecea durante algunos minutos (Orlando siempre tiene sueño, siempre está cansado), pero se despierta con las risas de la gente y él también se divierte un rato. Cuando salen de la sala, Irma sueña con que estén las cámaras para preguntarles qué les pareció la cinta, como en las propagandas de la peli, pero eso nunca sucederá porque las cámaras jamás irían hasta el barrio donde viven Irma y Orlando.

lunes, 25 de agosto de 2008

La religión

Irma y Orlando no son especialmente religiosos, aunque se casaron por iglesia y bautizaron a los chicos. La primera comunión la tomaron las nenas porque quisieron y al varón ni siquiera se les ocurrió mandarlo a catequesis.

La hermana de Irma sí se copa con las distintas modas religiosas, e Irma a veces la acompaña, pero más por curiosidad y aburrimiento que por fe. La Virgen Desatanudos, el Padre Mario, ese tipo de cosas. Una vez fue con la hermana a San Nicolás para visitar a la Rosa Mística porque, decía, le daba miedo dejarla ir sola.

Pero es Orlando el que, calladito la boca, sin que nadie lo sospeche, a veces le reza "al Barba". Le pide trabajo y salud y le agradece la familia que tiene.

jueves, 21 de agosto de 2008

Orlando y la salud

A Orlando no le gusta ir al médico porque le da miedo que "le encuentren algo". El dice que no le gusta ir al médico porque tiene poco tiempo y que le ocuparía tiempo que tendría que estar en el negocio. Puras mentiras. El sabe que Irma no le cree, pero igual apela a esa infantil excusa con tal de no someterse a análisis de sangre, a que se sepan sus descontrolados valores del colesterol. Nada le daría más vergüenza que subirse a la balanza delante de un médico.

Igualmente, ya cansada de él, Irma hace años que le saca los turnos para el médico y lo obliga a ir.

miércoles, 20 de agosto de 2008

Embelesada

"¡Qué espectáculo!", dice Irma, embelesada, ante la inauguración de los Juegos Olímpicos, el flambeado de un panqueque en un restorán o las Cataratas del Iguazú.

martes, 19 de agosto de 2008

Orlando uruguayo

Según Agus, fiel amiga y lectora de este blog, el Orlando uruguayo se llama Ruben (con acento en la U). Pese a que todavía no sabe cómo se llama la Irma uruguaya, asegura que ella se enoja con Ruben porque los domingos cuando salen a matear a la plaza él lleva la radio y no le da bola. "No me llevás el apunte", le dice la Irma uruguaya, que todavía no tiene nombre propio

sábado, 16 de agosto de 2008

Educación sexual

Irma trata de ser una mamá piola para sus hijas. Sin llegar al extremo de querer entablar con ellas conversaciones sobre sexo, tampoco las persigue con advertencias ni mucho menos prohibiciones.

Irma (que, no lo ocultemos más, es bastante fogosa) desea para sus hijas una vida sexual plena. Pero lo que la aterroriza es que queden embarazadas. En la tele, en las revistas, busca consejos para encarar esa charla que viene postergando sobre anticoncepción. Sólo eso, nada de hablar de orgasmos ni posiciones. Irma es piola, sí, pero tampoco es Moria.

Con respecto al varón, cree que no coge. Y que, si no deja la computadora, no va a coger nunca.

viernes, 15 de agosto de 2008

Antes era distinto

Orlando es un fiel reflejo de las distintas crisis y desventuras económicas que sufrió el país. Cuando era un joven robusto, y no este grandote malhumorado, irradiaba otra jovialidad, era más entusiasta, aunque nunca fue el centro de la escena.

Los distintos problemas que fue sorteando para sobrevivir le fueron quitando el ánimo. El alquiler del negocio, los proveedores, los empleados, los clientes, la inflación, el dólar, todo fue haciendo mella en su ánimo. Irma todo esto lo sabe, aunque nunca lo charlaron, y por eso le tiene tanta paciencia.

miércoles, 13 de agosto de 2008

Plata

"Dame plata, Orlando", ordena Irma. Y Orlando desembolsa.

Así de simple resuelven el espinoso tema del dinero.

Claro está que Irma administra la economía doméstica, pero por algún oscuro motivo prefiere que los billetes no se encuentren materialmente en su poder. O sea que Orlando viene a ser algo así como su alcancía viviente.

Nota: Cualquier semejanza entre Irma y la que suscribe, para quien vacaciones es no tocar dinero, es mera coincidencia.

sábado, 9 de agosto de 2008

Pies

Irma tiene algún problema en los pies: juanetes, dedo martillo o un dedo encimado con otro.

No usa nunca sandalias ni ojotas. No le gusta verse ese defecto ni que se lo vean.

A la playa va en zapatillas. Sólo se las saca para meterse al mar.

jueves, 7 de agosto de 2008

Irma en vacaciones

Cuando van de vacaciones, Irma quiere hacer todo. Visitar las atracciones turísticas, hacer shopping, estar al aire libre, comprar regalos que dicen "Recuerdo de", tomar fotos, comer afuera, caminar para bajar la comida, ver algún espectáculo.

No duda en ponerse el despertador para arrancar el día temprano.

La incompatibilidad entre su forma de vacacionar y la de Orlando es total. Mientras los hijos fueron chicos, Irma se conformó arrastrándolos a ellos por todos lados.

En los últimos años, Irma está en crisis con las vacaciones. Alguna vez se fue un fin de semana con una amiga, para probar, pero no se terminó de sentir del todo bien.

miércoles, 6 de agosto de 2008

Suegra

La mamá de Irma vive, pero no vive cerca de lo de ellos, así que llama bastante por teléfono. Una vez al día es su promedio, pero hay días en los que se aburre mucho, así que llama alguna vez más, con alguna excusa boluda.

Su característica principal es que rompe las bolas. Por ejemplo, es habitué de los asados del domingo, ya habrá ido a más de 200 asados hechos por Orlando, pero sigue llamando cada domingo a la mañana para preguntar si lleva algo. Irma le dice que sí, que traiga lo que quiera y su mamá le dice que bueno, que no se enoje, que ella sólo quiere ayudar.

martes, 5 de agosto de 2008

Orlando en vacaciones

Cuando se van de vacaciones, Orlando sólo quiere hacer dos cosas: dormir y comer.

Si van a Entre Ríos, quiere comer pescado. Si van a Mar del Plata, mariscos. Y así.

"Me deslomo todo el año. Cuando estoy de vacaciones, quiero des-can-sar", le dice a Irma, y se manda siestas de tres o cuatro horas, mientras su organismo intenta procesar un almuerzo descomunal.

domingo, 3 de agosto de 2008

Tuerca

Ya lo hemos sugerido, pero vamos a decirlo con todas las letras: Orlando mira el TC, la Fórmula 1 y casi cualquier categoría de automovilismo que sea televisada.

Es que Orlando es tuerca. Es fana de ciertos pilotos y hace fuerza por algunas escuderías de acá y del mundo. Los domingos mira las carreras mientras hace el asado. Sabe de autos, pero no tanto como parece. A su hijo varón lo tiene harto con sus anécdotas de cuando iba a ver al TC al Autódromo y de las veces que viajó al interior para ver las carreras.

Muletilla

"Qué hombre", suele decir Irma cada vez que aparece algún hombre (actor, músico, político, conductor de tele) que le gusta. Lo dice y suspira y se toma un mate con Chúker.

viernes, 1 de agosto de 2008

De vacaciones

"Abrís y hay una solución".

(Lo dice Irma, abriendo cajones y alacenas, encantada con el bungalow en el que pasan unos días de vacaciones).

Nota: La deuda de este blog con Daro se acrecienta.